Un tipo de azúcar es el llamado sacarosa, es decir, el azúcar blanco que solemos poner en la mesa. Este azúcar es realmente negativo para la salud. En el proceso a este tipo de azúcar se le ha privado de impurezas, pero también de vitaminas y minerales, y su consumo excesivo se asocia con trastornos como la obesidad, la diabetes.
Otra cosa distinta es la glucosa, un tipo de ázucar propio de hidratos complejos como el almidón, que es imprescindible para el cerebro y para la vida general.
De ahí que , al ánalisis de los hidratos complejos ( cereales integrales especialmente ) es muy importante que estos no falten, se necesitan como un mínimo de 60 g. diarios, el cuerpo consume porteínas y los tejidos (como el corazón) que conforman.
Del azúcar refinado se puede pasar sin problema porque, además, tira del calcio para su absorción, es decir se une al calcio presente en la sangre formando un compuesto que tiende a eliminarse por el instentino y los riñones.
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