
Aun cuando la reducción de los valores de tensión arterial parezca pequeña, puede ser suficiente para traducirse en una rebaja significativa de la incidencia de accidentes cerebrovasculares e infartos de miocardio.
Te sentirás progresivamente más sano y en mejor forma física.
Mantiene el peso corporal y previene la obesidad.
Ayuda a que el corazón funcione mejor: reduce el número de latidos por minuto, mejora su contracción y desarrolla nuevas arterias.
Evita la ansiedad, la depresión y el estrés.
Controla la tensión arterial, los niveles de colesterol y de glucosa.
Qué precauciones tomar
Antes de comenzar un programa de ejercicio físico, debes consultar con tu médico.