viernes, 31 de julio de 2009

LOS PELIGROS DEL EXCESO DE GRASA CORPORAL

Evitar el riesgo de enfermedades perdiendo el exceso de grasa corporal. Los Peligros del Exceso de Grasa Corporal
perder grasa

La principal motivación por controlar el peso para la mayoría de la gente es la de mejorar su apariencia. Igualmente importante, sin embargo, son los demás beneficios de una adecuada nutrición y ejercicio regular.

El control del peso a través de la reducción del exceso de grasa corporal juega un rol vital para mantener una buena salud y combatir las enfermedades. De hecho, la evidencia médica muestra que la obesidad representa una importante amenaza a la salud y la longevidad. (La definición más común de obesidad es más del 25 por ciento de grasa corporal para hombres y más de 22 por ciento para mujeres). Se estima que uno de tres americanos tiene algún exceso de grasa. Aproximadamente el 20 por ciento son obesos.


El exceso de grasa corporal está vinculado a importantes amenazas físicas tales como enfermedades cardíacas, cáncer y diabetes. (Tres de cuatro americanos mueren sea por enfermedades cardíacas o cáncer cada año; de acuerdo al estudio del Examen Nacional de Salud y Nutrición, 80 por ciento de esas muertes están asociadas con factores de estilo de vida, incluyendo inactividad.)

Por ejemplo, si eres obeso, consumes más energía para respirar dado a que tu corazón debe trabajar más duro para bombear sangre a los pulmones y al exceso de grasa a lo largo del cuerpo. Esto sobrecarga de trabajo puede causar que tu corazón se agrande provocando presión alta y perjudicialmente erráticos latidos del corazón.

La gente obesa también tiende a tener altos niveles de colesterol, haciéndolos más propensos a arteriosclerosis, un estrechamiento de las arterias por depósito de plaquetas. Esto se vuelve perjudicial para la salud cuando los vasos sanguíneos se vuelven tan angostos o se bloquean de modo que órganos vitales como el cerebro, el corazón o los riñones se ven privados de sangre. Asimismo, el estrechamiento de los vasos sanguíneos fuerza al corazón a bombear más duramente, elevando la presión sanguínea. La presión alta de por sí, implica diferentes riesgos para la salud, incluyendo ataques cardíacos, falla renal o apoplejía. Alrededor del 25 por ciento de todos los problemas cardiovasculares están asociados con la obesidad.

Estudios clínicos han descubierto una relación entre el exceso de grasa corporal y la incidencia del cáncer. Por sí misma, se cree que la grasa corporal es un lugar de almacenaje de cancerígenos (sustancias causantes del cáncer) tanto en hombres como en mujeres. En las mujeres, el exceso de grasa ha sido relacionado con una tasa mayor de cáncer de mama y de útero; en los hombres, la amenaza proviene del cáncer de colon y próstata.

Hay también un delicado balance entre el azúcar en sangre, la grasa corporal y la hormona insulina. El exceso de azúcar en sangre es almacenado en el hígado y en otros órganos vitales. Cuando los órganos están “llenos”, el exceso de azúcar es convertido en grasa. A medida que las células de grasa también se “llenan”, tienden a captar menos azúcar en sangre. En algunas personas obesas, el páncreas produce más y más insulina, que el cuerpo no puede utilizar, para regular los niveles de azúcar, y todo el sistema se ve abrumado.

Esta pobre regulación del azúcar en sangre y la insulina produce diabetes, una enfermedad con consecuencias a largo plazo, incluyendo enfermedades cardíacas, fallo renal, ceguera, amputación y la muerte. El exceso de grasa corporal está también relacionado con problemas de la vesícula, enfermedades gastrointestinales, disfunción sexual, osteoartritis y apoplejía.

Reducir la grasa corporal reduce el riesgo de enfermedades

La buena noticia es que reduciendo la grasa corporal, se reduce el riesgo de las enfermedades. En la Universidad de Pittsburg, investigadores estudiaron a 159 personas mientras estas seguían un programa de control de peso. Los sujetos se encontraban bajo la edad de 45 años y entre las 30 y 70 libras de sobrepeso. Aquellos que fueron capaces de reducir tan sólo un 10 a un 15 por ciento de su peso y mantenerlo durante los 18 meses de duración del estudio mostraron una significante mejora en sus niveles de Colesterol HDL (Lipoproteínas de Alta Densidad, por sus siglas en inglés) y Triglicéridos, radio de cintura-caderas, y presión sanguínea. De hecho, según la Revista Medica de Nueva Inglaterra, la reducción de la grasa corporal como modulador de la estructura cardiaca es más poderosa que la terapia con drogas.

Para personas con antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, un estilo de vida activo puede disminuir o detener el proceso para todos aquellos con serios desórdenes genéticos. Estudios de Dean Ornish, Doctor en Medicina, han demostrado que un programa de intervención comprensivo que incluya actividad física regular, una dieta baja en grasas y un programa de reducción de estrés pueden incluso revertir el proceso de enfermedad cardiaca.

La evidencia también muestra que un estilo de vida activo y su ayuda para reducir la grasa corporal está asociado con un menor riesgo ante ciertos tipos de cáncer: de próstata para hombres; de mama y de útero para mujeres. (Frisch, y otros 1985).

Asimismo, la actividad física regular y una dieta baja en grasas son exitosas al tratar diabéticos no insulinodependientes (diabetes tipo 2); para algunos pacientes, ha reducido o eliminado la necesidad de sustitutos de la insulina. En general, adultos regularmente activos tienen un 42 menos de riesgo de desarrollar Diabetes tipo 2.

Ganar peso le sucede a la mayoría de las personas

El americano promedio aumenta al menos una libra por año después de los 25 años de edad. Piénsenlo, si eres como la mayoría de los norteamericanos, a la edad de 50 es probable que hayas aumentado 25 libras de grasa, o más. Asimismo, tu metabolismo está en disminución, haciendo que tu cuerpo trabaje menos efectivamente para quemar las grasas que posee. A su vez, si no te ejercitas regularmente, perderás una libra de masa muscular por año. En consecuencia, la gente no sólo estará aumentando sus reservas de grasa, aumentando su riesgo de enfermedad, sino que también estarán perdiendo músculo, aumentando el riesgo de lesiones, menguando su desempeño en la actividad y disminuyendo aún más su metabolismo.

Muy pocos norteamericanos se ejercitan en alguna forma significativa. El Consejo sobre Salud Física y Deportes del Presidente estima que sólo uno de cinco americanos hace ejercicio por su salud por al menos 20 minutos, tres o más veces por semana. De hecho, el americano promedio realiza menos de 50 minutos de ejercicio por semana. Aún peor, dos de cinco americanos son completamente sedentarios.

La respuesta: comida saludable y salud físico

Pero hay esperanzas. La pérdida moderada de peso –de grasa, no de músculo—y un estilo de vida saludable y activo –no de dietas—han resultado disminuir los riesgos en la salud y los problemas médicos en el 90 por ciento de los pacientes con sobrepeso, mejorando su función cardiaca, presión sanguínea, tolerancia a la glucosa, desórdenes del sueño, niveles de colesterol, tanto como recortando su necesidad de medicación, menguando la incidencia y duración de hospitalización, y reduciendo las complicaciones post-operatorias ocho veces; menos probabilidades de morir de cáncer que los que están fuera de forma, y 53 por ciento menos de chances de morir de otras enfermedades. La gente en forma tiene también ocho veces menos probabilidades de morir de enfermedades cardíacas.

Entonces, ¿estáis dispuesto a ser paciente y hacer cambios graduales en tu vida que van a conducirte a un tú mismo más saludable y feliz? Una vez que hayas decidido ir para adelante y aceptar el cambio, la parte difícil terminó. Seguro, hay mucho trabajo por hacerse, pero realmente no importa cuánto tiempo tome este proceso. Si permites que los cambios estén por algunos años, tu cuerpo se ajustará cómodamente, y es muy probable que mantengáis ese estilo de vida saludable permanentemente.

Cuando comienzas a lograr mejoras en tu energía y en tu desempeño físico y psicológico, la diversión y excitación que experimentarás harán que el cambio bien valga el esfuerzo. ¡La acción crea motivación! Buena suerte: espero que disfruten los maravillosos beneficios de un programa seguro y efectivo de control de peso.


Chad Tackett, presidente de Salud y Fitness Global (GHF), posee títulos en Ejercicio, Salud, Ciencia y Nutrición, es un Entrenador Personal certificado, y un habitual conferencista para ambas audiencias, profesional y laica, en los principios del ejercicio efectivo y la buena nutrición. Visita GHF y encontraréis recomendaciones para estar en forma fáciles de seguir, cientos de instrucciones de ejercicios y demostraciones en video, programas personalizados, recetas saludables y planes de comida, una análisis nutricional gratuito, Health Club y directorios con entrenadores personales y mucho más!

No hay comentarios:

Publicar un comentario